El presidente de EEUU Barack Obama conversa con el presidente dictador de Cuba Raúl Castro
En el marco de la Asamblea General de la ONU, Barack Obama y Raúl Castro sostendrán el próximo martes una reunión formal en Nueva York, segundo encuentro cara a cara entre ambos después del restablecimiento de relaciones entre EEUU y Cuba a fines del año pasado.
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Tanto el Gobierno de Estados Unidos como el de Cuba ya habían adelantado la posibilidad del encuentro.
Un funcionario de la Casa Blanca anunció la celebración de la reunión bilateral entre Obama y Castro a los periodistas en el Air Force One rumbo a Nueva York, a donde el presidente estadounidense llegó el domingo sobre las 11:30 hora local.
A comienzos de septiembre, Obama y Castro también conversaron telefónicamente, algo poco común, antes de la visita del papa Francisco a sus respectivos países.
Estados Unidos y Cuba restablecieron en julio sus relaciones diplomáticas después de más de medio siglo de ruptura y enfrentamientos.
Además de su reunión bilateral con Castro, la Casa Blanca informó que Obama se reunirá con el presidente de Kazajstán, también el martes.
El sábado, el dirigente cubano participó sorpresivamente de la Cumbre de Desarrollo Sostenible que se celebra en la ONU, con un discurso en el que pidió el fin del bloqueo comercial, económico y financiero aplicado por Estados Unidos contra Cuba desde hace medio siglo.
El mismo día, Castro conversó en Nueva York con el titular de la Cámara de Comercio de Estados Unidos, Tom Donohue, y varios empresarios norteamericanos sobre la posibilidad de negocios abierta con el proceso de acercamiento entre los dos países.
También participaron la vicepresidenta de la Cámara de Comercio estadounidense, Jodi Bond, el administrador de la cadena hotelera Starwood, Kenneth Siegel, el presidente de la compañía Carterpillar, Douglas Oberthelman, y los vicepresidentes de American Airlines, Art Tomo, y de General Motor, Lee Godown.
Un día antes, la Cámara de Comercio norteamericana anunció la creación del Consejo de Negocios EEUU-Cuba (USCBC, por sus siglas en inglés), con el objetivo de “construir una relación comercial fuerte y estratégica” entre los dos países.
El USCBC centrará esfuerzos “estratégicos” en “maximizar” el potencial de la relación comercial entre ambos países, pidiendo y defendiendo reformas en las dos naciones y aprovechando el restablecimiento de las relaciones diplomáticas, según explicó entonces Tom Donohue.
