El cardenal George Pell, responsable de Finanzas del Vaticano, fue acusado este jueves de múltiples abusos sexuales contra niños en Australia, anunció la policía de ese país.
“La policía de Victoria ha acusado al cardenal George Pell de delitos de abuso sexual” cometidos en el pasado, declaró el comisario adjunto Shane Patton a los periodistas, ocho meses después de que la policía australiana interrogara a Pell en Roma por estas acusaciones, que él desmiente.
El cardenal Pell sostuvo este jueves que era inocente de las acusaciones de abuso sexual presentadas en su contra en Australia y dijo que el pontífice le dio permiso para regresar a su país a defenderse.
“Espero finalmente tener mi día en la corte. Repito que soy inocente de estas acusaciones. Son falsas”, dijo Pell, de 76 años, en una conferencia de prensa, horas después de conocerse la acusación.
El portavoz del Vaticano, Greg Burke, dijo que si bien la Santa Sede respeta el sistema de justicia australiano, señaló que Pell había cooperado con investigaciones en el pasado.
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“Hay varios denunciantes relacionados con esos cargos”, agregó el comisario Patton, que no dio otros detalles de los cargos ni respondió preguntas de los medios alegando la necesidad de preservar la integridad del proceso judicial.
Patton afirmó que el cardenal tendrá que comparecer ante la Corte de Magistrados de Melbourne el próximo 18 de julio.
La acusación de Pell llega tras una larga investigación sobre las respuestas institucionales aportadas en Australia a los supuestos abusos sexuales cometidos contra niños, ordenada por el gobierno en 2012.
Pell había comparecido en tres ocasiones en el marco de este caso y reconoció ante la comisión de investigación que había “fallado” en su gestión de los curas pedófilos en el estado de Victoria en la década del 70, detalla la agencia AFP.
El cardenal tiene 76 años y era sacerdote en la ciudad rural de Ballarat, Victoria (Autralia). Fue ordenado sacerdote en Roma en 1966, y luego regresó a Australia 1971 en donde ascendió posiciones hasta ser nombrado arzobispo de Melbourne. Ha vivido en el Vaticano desde 2014, cuando fue elegido por el papa Francisco para aportar transparencia a las finanzas del Vaticano.