Jarvis Thompson, quien conoció a Tate desde la niñez, dijo que él quería ser policía para marcar la diferencia en la comunidad negra.
“Quería convertirse en un agente porque hemos visto a muchos de nuestros semejantes ser asesinados o terminar en la cárcel”, señaló Thompson, de 24 años y residente de Starkville. “Él hablaba todo el tiempo sobre cómo quería hacer mejor las cosas y hacer que el lugar fuera mejor”.
El domingo, manchas de sangre marcaban aún el lugar en la calle donde ambos fueron baleados, y un flujo constante de gente visitaba el sitio para dejar flores y globos. En la cercana Iglesia Bautista New Hope, creyentes rezaban por los policías caídos y sus familias.
“Esto debería recordarnos agradecer a todos los agentes judiciales por su inquebrantable servicio para protegernos y servirnos”, dijo el gobernador de Mississippi, Phil Bryant, en un comunicado. “Que Dios los tenga en el seno de su mano”.
Cuatro sospechosos arrestados
Marvin Banks, de 29 años, y Joanie Calloway, de 22, fueron acusados cada uno de dos cargos de homicidio calificado, dijo Warren Strain, un vocero del Departamento de Seguridad Pública de Mississippi. Banks fue además acusado por ser un criminal en posesión de un arma de fuego y por robo agravado al huir a bordo de la patrulla policial después de la balacera, señaló Strain.
“Él se dio a la fuga en una patrulla de Hattiesburg. No llegó muy lejos, tres o cuatro manzanas, y entonces abandonó ese vehículo”, agregó.
Curtis Banks, de 26 años y hermano de Marvin Banks, fue acusado de dos cargos por complicidad después de que se cometiera homicidio calificado.