Los cuatro niños que, según las autoridades, fueron tomados como rehenes y asesinados por un sospechoso de haber disparado contra un oficial de la policía de Orlando, fueron identificados por un representante de la familia el martes en una página web para recaudar fondos.
Los niños ahora identificados como Iraya, de 12 años, Lillia, de 10, Aidan, de 6, y Dove, de un 1 año, fueron hallados muertos dentro de una unidad del segundo piso en el conjunto Westbrook Apartments, cerca del parque temático Universal Studios.
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La policía dijo que el presunto asesino, Gary Wayne Lindsey, de 35 años, se quitó la vida después de matar a los niños.
Walter Benenati, la persona que inició la campaña, se presenta como un representante de la familia inmediata de los niños. La página web busca recaudar fondos para cubrir los gastos funerarios de los cuatro pequeños.
“Estamos recaudando dinero para Ciara que perdió a sus cuatro hermosos hijos el 11 de junio”, explicó Benenati en el portal.
Según lo había confirmado la policía, el novio de la mujer, era el padre de dos de los niños.
“Lindsey era el padre de dos de los niños y tomó egoístamente la vida de estos preciosos ángeles inocentes y luego se quitó la vida”, dijo Benenati. “Es un final trágico para una noche de horror”, escribió en el portal.
Benenati dijo que está tratando de ayudar la familia inmediata a reunir los fondos para gastos funerarios de los cuatro niños y para ayudar a Ciara a levantarse.
Rehenes por casi un día entero
La tragedia comenzó cuando los oficiales llegaron al complejo de apartamentos en Orlando en las últimas horas del domingo después de que una mujer dijera que fue golpeada por el sospechoso, a quien ella describió como su novio, según explicó la policía.
El hombre fue identificado como Gary Lindsey Jr. y tenía cuatro niños de 1, 6, 10 y 12 años en el apartamento.
