El diario ‘The Washington Post’ afirma que la oficina de ética de la Casa Blanca determinó que la hija y asesora del presidente Donald Trump empleó su e-mail privado cientos de veces para discutir información oficial, en violación a las reglas de registros federales.
Ivanka Trump, la hija y asesora del presidente Donald Trump, utilizó cientos de veces una cuenta personal de correo electrónico para discutir asuntos oficiales de gobierno, muchos de ellos en violación de las reglas de los registros federales, según reveló este martes The Washington Post basándose en análisis internos de la Casa Blanca.
Los funcionarios de ética de la Casa Blanca se enteraron del uso repetido del correo electrónico personal de Ivanka Trump cuando revisaron los registros electrónicos recopilados el otoño pasado por cinco agencias del gabinete para responder a un requerimiento de registros públicos. Esa revisión reveló que a lo largo de gran parte de 2017, la asesora presidencial discutió o retransmitió a menudo asuntos oficiales de la Casa Blanca usando una cuenta de correo electrónico privada con un dominio que comparte con su esposo, Jared Kushner.
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Durante la campaña electoral de 2016, Trump no se cansó de criticar a su adversaria demócrata Hillary Clinton por una práctica similar, cuando ella se desempeñó como secretaria de Estado. Inclusive, llegó a pedir prisión por ventilar asuntos públicos a través de un sistema de correo electrónico privado.
Algunos ayudantes se sorprendieron por el volumen de los correos electrónicos personales de Ivanka Trump, y todavía más por la respuesta de ella cuando se le preguntó sobre la práctica. Dijo que no estaba familiarizada con algunos detalles de las reglas, según las personas que conocían su reacción.
Hillary Clinton fue investigada por el FBI el uso del correo electrónico privado. En su función como jefa de la diplomacia estadounidense, que desempeñó entre 2012 y 2015, envió y recibió 60,000 correos durante sus cuatro años en el Departamento de Estado. Clinton afirmó que borró la mitad de ellos, porque eran personales (asuntos, según ella, como sus rutinas de yoga o los preparativos de la boda de su hija Chelsea), y que la otra mitad (casi 55,000 páginas) fue entregada al Departamento de Estado, que los revisó y publicó en tandas mensuales, por orden de un juez federal.
Aunque Clinton dijo originalmente que ninguno de los mensajes que envió o recibió eran “clasificados”, el FBI determinó posteriormente que 110 correos electrónicos contenían información clasificada en el momento en que fueron enviados o recibidos. Pero tras la revisión de toda la documentación, el Buró de Investigaciones concluyó que Clinton no debería ser encausada, como lo pedía entonces la oposición republicana, al señalar que aunque la secretaria de Estado había sido “extremadamente negligente”, no puso en riesgo la seguridad de la nación.
Ivanka Trump utilizó su cuenta personal para discutir las políticas del gobierno y los asuntos oficiales menos de 100 veces, a menudo respondiendo a otros funcionarios de la administraciónque se comunicaron con ella a través de su correo electrónico privado, según personas familiarizadas con la revisión.