Roberto Salcedo, Alcalde de la ciudad de Santo Domingo
El Bloque de Regidores del Partido Revolucionario Moderno (P.R.M.), considera que el acto de rendición de cuentas de la gestión peledeistas encabezada por el Alcalde Roberto Salcedo, es una evidencia más de que los dirigentes del partido de gobierno, viven en un estado de ensueño, divorciado de la realidad que vivimos la mayoría de los ciudadanos; ha sido una repetición del mismo espectáculo que se ha montado en los últimos 12 años, caracterizado por anuncios y promesas, sin presentar realizaciones tangibles, que tiendan a mejorar los servicios municipales.
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Como ejemplo tenemos que el pasado año, en este mismo escenario el Alcalde Salcedo anuncio que la gestión peledeistas realizaría : La reconstrucción del paseo 30 de Mayo, para dar terminación al malecón de Santo Domingo, trabajos que están abandonado a pesar de tener asignado en el presupuesto 300 millones de pesos, la construcción de la Plaza Mandela y la reconstrucción de la plaza Peña Gómez, en la cabeza del Puente Francisco del Rosario Sánchez (de la 17), la reconstrucción de la Plaza la Trinitaria, en la cabeza de los puentes Duarte y Bosch, pero esas zonas está completamente abandonadas y arrabalizadas.
El pasado año prometió la construcción del centro de enseñanza laboral del sector Cristo Rey, en las antiguas instalaciones de Talleres Vulcanos, ese local permanece abandonado, por vez número 18 en sus 12 años de gestión anuncio la solución al grave problema de la arrabalizacion del entorno de la Duarte con Paris, prometió la implementación del sistema de rutas y frecuencias para la recolección de los desechos sólidos, a fin de que cada ciudadano sepa el día y la hora en que pasaran los camiones a prestar este servicio, y la construcción de una nueva estación de transferencia pero nada realizo, promesas incumplidas recibió la ciudad de su Alcaldía en ultimo año.
El pasado año el Alcalde Salcedo prometió que la gestión del P.L.D. que él encabeza remitiría la Concejo de Regidores los planes de regulación de las construcciones en el Distrito Nacional y la de los permisos para la instalación de comercios e industrias, ese plan quedo también como anuncio y hoy los ciudadanos de la capital viven en un estado de desosiego, pues nadie sabe que día al lado de su casa se construirá una torre de apartamentos o un centro comercial, o alguien convertirá una vivienda en un colmadon, en un colegio, o en un centro de diversión, lo que demuestra la incompetencia de la gestión peledeistas en materia de planificación urbana.
En la ciudad de Santo Domingo seguimos sufriendo de calles oscuras, lo que aumentan la inseguridad ciudadana, por la falta de bombillas, mientras el ayuntamiento recibe de las empresas distribuidoras de electricidad 250 millones de pesos anuales, el cableado urbano de la ciudad no tiene nada que envidiarle al de una ciudad fantasma, a pesar de la existencia de una normativa que regula las empresas de ese sector, pero que no ejecuta el Alcalde peledeistas de la capital, la mayoría de nuestras calles no tienen señalización ni sus inmuebles numeración, en las calles no existen semáforos y los que existen funcionan porque Obras Publicas y el sector privado lo han asumido.
Olvido al Alcalde Salcedo, señalar que por la realización de acciones y obras sin la debida socialización con los ciudadanos, el cabildo ha sido escenario de conflictos y como resultado de la incapacidad gerencial del equipo que lo ha acompañado en los últimos 12 años, el gobierno central creó una entidad para que administre los mercados de la ciudad y transfirió al Ministerio de Turismo la administración y gobernabilidad de la ciudad colonial y que como resultado de la desconfianza en su gestión, sumado a la división y lucha interna por el liderazgo en el P.L.D., a la ciudad de Santo Domingo le fueron sustraídos de su asignación anual 290 millones de pesos y que el ayuntamiento por primera vez en los últimos 12 años publica sus deudas reflejando que arrastra una deuda de más de 950 millones de pesos, que representa el 25% del presupuesto anual.
Ante este panorama, creemos que la gestión del P.L.D. en la capital ha colapsado y se apresta a cumplir su último año de desgobierno y desorden en que ha sumido en los últimos 13 años a la ciudad de Santo Domingo, convirtiéndola en una vergüenza para todos los dominicanos.
