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Ciertamente es algo desagradable que hoy en España necesitada
de mayor cohesión y solidaridad alguien se dedique a evocar
aquella desdichada y sangrienta lucha fratricida.
Pero así es. La Izquierda Marxista Española que de un modo que
no entiendo ha conseguido el poder, está ahora evocando el conflicto y tratando de desmantelar todo signo, cruz, nombre, huella, monumento, que recuerde la derrota de sus abuelos en la Guerra.
Ahí lo dejo, porque lo que me interesa hoy explicar y usar el símil de aquella historia, es que, precisamente en aquella situación, la alineación de los bandos en la guerra civil tiene un gran parecido a la alineación de los bandos, por supuesto, politicos no armados, de la disputa en USA y ya en menor escala en varios países de Europa.
Esto es algo que según parece muy pocos han captado. En Europa el asunto principal de la pugna es esa desordenada y sospechosa “inmigración”, principalmente la de ideología musulmana.
Y, como se dice, por casualidad, aquí también estamos que si el ICE está deteniendo “padres de familia”. No se dice que indocumentados; que si el Muro, etc. Hace unos días era sobre unos “buenos samaritanos” que dejan depósitos con agua en un tramo de la frontera que es un peligroso desierto y donde han muerto centenares de “inmigrantes” intentando
cruzarlo. Parece que los policías de la frontera no simpatizan con los aguateros. En fín, que ahora vienen en caravanas. Que son más de tres las que han salido. Y más de una las que han llegado. Y no sabemos cuantas más vendrán.
Por otra parte, como podemos ver, las ideologías y costumbres contrarias a la Democracia y el Cristianismo: el Islamismo, el Marxismo y la Ideología de Género, están de un lado. Asi aparecen en la nómina de los nuevos miembros
Demócratas de la Cámara, musulmanes, gente de la LGBT y marxistas del Senador Sanders.
Del lado Republicano aparecen muchos Veteranos de las Fuerzas Armadas, y viejos luchadores por la democracia, cristianos o al menos partidarios de la libertad religiosa.
Muy claramente se van perfilando los dos bandos. En la Guerra Civil Española, militares y cristianos mayoritariamente católicos, del lado de los Nacionales. Del lado de la “República” en principio hubo gente de muy diversa ideología. Pasados los primeros meses los comunistas de Stalin fueron eliminando a unos, echando a un lado a otros, y se hicieron ellos con todo el poder.
Aquí, algo semejante. El voto de los cristianos fué decisivo para el triunfo de Trump. Los evangélicos votaron en más de un 80% por el Partido Republicano. Los católicos en menor proporción.
Está aquí también jugando un papel importante la actitud pro vida de los
Republicanos y lo que los partidarios del aborto llaman derecho de la mujer.
Lo último de esta disputa es el aborto con el niño nacido vivo. Creo que así se dice. El detalle exacto no lo escribo aquí porque he rechazado leerlo. Me imagino un aborto después de ocho meses de embarazo. Monstruosidad que promueven el Alcalde y el Gobernador Demócratas de New York.
Un capítulo desdichado del símil que propongo es el de los que ya iniciados los tiros quedan en el bando al que no pertenen.
Es el capítulo de los fusilados en Paracuellos del Jarama y en otros lugares.
Gente a la que la Guerra atrapó en Madrid cuando los Nacionales avanzaban ya sobre la ciudad. Otros fueron los que como Antonio Machado se quedaron en Madrid aunque no pertenecían para nada a esa maldita etnia marxista que allí predominó.
Aquí también tenemos hoy mucha buena gente equivocada. Principalmente entre los hispanos. Usted dirá.