Por Ramón Mercedes
NUEVA YORK, EE.UU.- Alarmados reaccionaron algunos padres dominicanos tras la noticia de que Christopher Freeman, de 27 años, se presentó a la escuela Bear Lakes Middle School, de West Palm Beach, en Florida, con un fusil AK-47 cargado porque su hijo le llamó por celular y llorando expresó “papi el profesor me pegó”.
El suceso ocurrió el pasado lunes y se ha hecho viral en las redes.
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En el Alto Manhattan, los criollos han expresado, “en mis tiempos mi papá me daba otra pela”; “el papá en vez de averiguar, envía un ejemplo negativo a su hijo y demás menores al ir armado”; “se ve a lejos que ese papá tiene al hijo sobreprotegido”; “es mejor corregir estando pequeño para evitar que le den un balazo cuando grande, al no respetar a nadie”, entre otras.
Cuando Freeman se presentó a la escuela secundaria para resolver, se armó un corre corre y en el centro educativo fue cerrado momentáneamente, indica el rotativo The Palm Beach Post.
A los pocos minutos se presentó un contingente policial armado con fusiles y arrestó al “guapo padre”. No se llegó hacer ningún disparo. Los guardias de seguridad jugaron un papel importante en la situación, se informó.
Al padre le presentaron cargos por los delitos de “asalto agravado, posesión de un arma en una propiedad escolar y perturbación de la paz”.
