Por Polón Vásquez
Pvasquez3570@yahoo.com
FILADELFIA, PA–Tras el cierre del Hahneman University Hospital, las pacientes embarazadas posiblemente tendrán que pagar más debido al traslado a otros centros de salud.
Todas las cirugías y procedimientos que no sean de emergencia ya no se realizarán en el Hospital Hahnemann, a partir del 12 de julio, y eso incluye las labores de parto, según una carta enviada a los pacientes el martes.
“Si va a dar a luz en julio y agosto, nos pondremos en contacto con usted por teléfono para coordinar su admisión en otro hospital de Filadelfia”, indica la carta del Departamento de Obstetricia y Ginecología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Drexel.
Los doctores de Drexel atienden muchos de los departamentos y salas del Hospital Hahnemann. Una portavoz de Drexel dijo que hay 819 mujeres embarazadas que esperan dar a luz en entre julio y agosto, y que están siendo contactadas.
El abrupto anuncio de cierre del hospital de Center City el mes pasado provocó caos en la comunidad médica de Filadelfia y en el protocolo de respuesta a emergencias.
Una quiebra se mantiene pendiente para su empresa matriz, con cientos de médicos de residencia preguntándose qué les deparará el futuro.
En total, se perderán unos 3,000 empleos cuando el hospital cierre completamente a fines de este año.
A pesar de las demandas de los funcionarios de salud de la ciudad y del estado, en las que solicitan a Hahnemann que continúe atendiendo las necesidades médicas del público hasta que el Departamento de Salud de Pennsylvania acepte un plan de cierre completo, el hospital comenzó a dar por terminados los servicios a principios de julio.
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Sin embargo, la secretaria de salud del estado anunció la semana pasada que se instalaría un gerente temporal en el hospital para ayudar a Hahnemann a cerrar sus oficinas.
El hospital comenzó a desviar a los pacientes de su centro de trauma de Nivel 1 durante el último fin de semana de junio.
“La asignación de un administrador temporal le permite al departamento acceder de inmediato a la información relacionada con las necesidades de los pacientes y el personal en ambos lugares”, dijo la Secretaria de Salud de Pennsylvania, Doctora Rachel Levine.
“Al trabajar con los funcionarios de PAHS para acordar con un administrador temporal, nos permite asegurarnos de que este proceso continúe sin problemas”.
En su protección de bancarrota del Capítulo 11 presentada en una corte federal de Delaware el 1 de julio, el Philadelphia Academic Health System, una compañía de responsabilidad limitada, dijo que busca liquidar las operaciones en Hahnemann mientras mantiene al hospital de niños St. Christopher en plena operación.
PAHS dijo que tenía pasivos entre $100 y $500 millones con solo $10 y $ 50 millones en activos.
En la carta de Drexel se les dijo a las futuras madres que podrían elegir el hospital de su preferencia para el parto y que se encargarían de ayudarles.
“Los médicos, matronas, enfermeras y enfermeras especializadas en Obstetricia y Ginecología de Drexel están comprometidos con su atención y están trabajando con los hospitales locales para brindarle la más alta calidad de atención”, dice la carta a los pacientes.
“Actualmente, Drexel Obstetrics and Gynecology está trabajando estrechamente con Thomas Jefferson, en Center City. Sin embargo, puede dar a luz a su bebé en cualquier hospital que elija, y coordinaremos con cualquier hospital que elija”.
La escuela de medicina de Drexel utiliza a Hahnemann como un campo de entrenamiento para más de 500 residentes médicos, y los dos tienen un acuerdo vigente que requiere que Hahnemann trabaje para colocar a esos residentes en diferentes hospitales si anuncia un cierre, dijo un abogado de Drexel en la corte.
Según las presentaciones judiciales, PAHS debe $20.1 millones a Tenent Healthcare, los antiguos propietarios de Hahnemann y St. Christopher; $14.1 millones a la Universidad de Drexel, que opera la escuela de medicina de Medican; y casi $700,000 para la ciudad; entre otras deudas.
