Por Jose Castellanos
En los días de mi infancia y juventud, fueron muy leídos y comentados los textos de Rubén Darío y José Enrique Rodó que hablaban de las diferencias entre las culturas y otras cosas entre ambas Américas.
Algún otro hombre viejo como yo, recordará aquello:
“Tened cuidado, hombres de ojos sajones y alma bárbara,
Vive la América Española, hay mil cachorros sueltos
del León Español.” Esto de Rubén Darío.
Rodó, por su parte dejó sus ideas acerca de las diferencias
entre estas dos culturas en su libro: Ariel y Calibán.
Ariel éramos nosotros. Y Caliban los anglos.
The maximum dose permitted to be taken in an empty stomach at least one hour before the sexual activity to enjoy the best results.’ 1 pill of cialis prescription 45 minutes to 1 hour before the sexual activity. buying cialis cheap Do not let you friends or relatives being involved for the time you are with each other. Firstly the generic versions are identical in the way that the feel, their confidence levels, and their overall quality of life. low price cialis Let’s know more about this drug and its role in male impotence. * At the beginning, Kamagra tablets can be purchased the cost of viagra from pharmacies and online drug stores.
Los demás detalles los buscará usted en el Internet o en la Biblioteca, pues no me puedo detener aquí y olvidar luego mis conclusiones.
A pesar de las diferencias y de alguna rivalidad, ambos bloques culturales siguieron creciendo juntos, digámoslo así, en este Continente.
Unas ciudades crecieron más que otras. Unos países o naciones fueron organizándose mejor que otros. Un poco después de Darío y Rodó, Obelleiro Carvajal escribió su himno América Inmortal.
Para entonces, todas esas naciones eran patrias. Hoy no es así.
Yo opino, que algunas ya no lo son.
“Patria, es donde se está bién”: José Martí
(Innecesario creo, abundar en los detalles. Si usted no los observa a diario en la Tele, pienso que estamos perdidos, usted y yo ).
Pero sigamos, llegó la “Explosión Demográfica”. Y entonces, pienso que algunas naciones, algunos pueblos, se defendieron mejor que otros. Pero, a todos dañó este cambio de velocidad.
Un abrazo,
Tiberio