Economista
Un presidente químico como Danilo Medina, quien dice haber estudiado economía, debería oír más los consejos de Luis Abinader un economista con post grados en economía sobre el efecto de sus medidas a corto y mediano plazo.
Me causa risa que un Ing. químico con tesis cuestionada, según el Ing. Gneco Medina, que aún no entienda que el coronavirus desde el 2007 está patentizado, ya que el galón de cloro dice en su etiqueta que corta ese virus y aun no sepa como higienizar mejor posible áreas de virus con un químico superior, como. hipoclorito de sodio me hace pensar que unos se gradúan de sus profesiones y otros no recuerdan lo que estudiaron.
En el Salvador, el árabe Bukele, sin ser químico le dio clase a muchos estadistas. Paralizo propagación.
Hoy, quiero analizar el tema consecuencias económicas de esta pandemia, el efecto de soltar mucha plata, posible inflación con recesión que se llama estanflación y lo que puede pasar en R.D.
El impacto económico no tardará en ser evidente, entre otros aspectos, al disminuir la movilidad social será inevitable impactar negativamente el sector informal, donde labora la mayor parte de la población. Ese trabajador al vivir al día, si no vende no come. Asimismo, se verán afectadas las pequeñas y microempresas, financieramente más vulnerables.
Entre otros impactos inmediatos: la falta de llegada de turistas afectará la ocupación hotelera en el sector turismo, a lo que hay que añadir el descenso de ingresos en bares, discotecas y gimnasios.
El descenso de la economía puede mirarse por el lado de la demanda y por el lado de la oferta.
Piense con más detenimiento los factores por el lado de la oferta; no todos los trabajadores pueden laborar desde su casa, los sectores de comercio deben abastecerse de importaciones.
Los hospitales privados y nacionales, el sector agrícola, distribución de agua, gasolineras, farmacias, bancos, supermercados, mercados informales, transporte público, restaurantes, deben adquirir insumos para seguir suministrando productos y servicios a los hogares, para continuar con su diario vivir.
Producir pocos bienes estando todos en cuarentena, es lógico, pero hay mucho circulante y los precios se dispararán, es un escenario que veo venir.
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El presidente químico-economista, dictará decreto y fijará precio de alimentos básicos que su gobierno pagará vía sus planes sociales a un tope $, aunque el suplidor lo venda al doble y vendrán las quejas.
Creo, en ese sentido que no es conveniente fijar precios inmediatamente.
En la historia existen innumerables ejemplos, donde con el objeto de mejorar la situación se empeora, al colocar cierto precio por decreto.
Si bien se persigue que los consumidores no desembolsen más por sus compras, lo cual es deseable, pero con la fijación del precio nada más, no se tiene garantía que en cierto momento no se complique aún más la cadena de suministro –proveedor, transporte, aduana, almacenaje, y entrega al consumidor.
Antes de propiciar mercados negros, lo pertinente para mejorar el precio o mantenerlo bajo es acomodar la oferta con la demanda, para lo cual es importante facilitar –no dificultar más– el transporte tanto interno como desde el exterior. Si se requiere más de cierto producto porque está aumentando de precio, es mejor autorizar mayores importaciones; como se hace cada año en el caso del arroz, ajo y pollo.
Por otra parte, las prácticas de acaparamiento son punibles y se deben impedir. También es mejor hacer conciencia y evitar el frenesí de compras desmedido, que solamente agota las existencias, y pone más presión sobre la cadena de abastecimiento; tan vital de mantener.
Declarar una congelación de los precios de los artículos de primera necesidad, para que la inflación no deje sin efecto las medidas compensatorias en favor de los más pobres, implica tener oferta, sustitutos y cadena de abastecimiento abierta, sin toque de queda.
Veré al Banco central aspirando pesos de la gran masa monetaria, a los especuladores haciendo su agosto y Luis Abinader callado, se lo advirtió y no escucho, eso le baja puntos a su partido lleno de burócratas que quieren quedarse en sus puestos, son eternos, como lo es la deuda eterna dominicana, que ahora con coronavirus pedirán condonarla, Ja, ja.
Les dije que por querer ser el dueño del circo y cogerse el show de ayuda como mérito del PLD, en vez de unirnos como nación tiene un costo.
Lo veremos en las elecciones, porque estamos divididos por los intereses económicos de dos grupos insaciables, de una ambición insuperable; uno que quiere imponer a un penco para mantenerse en el poder y evadir la justicia, mientras continúan acumulando riquezas, y, el otro, que quiere volver por las mismas razones y no le dan entrada al árabe que no tiene cola que le pisen porque nunca ha sido presidente. Esto se pone bueno.
