SANTO DOMINGO, RD.-Las autoridades de República Dominicana empezaron a tener contacto de manera directa con autoridades de Haití en momentos en que el presidente Luis Abinader ha insistido en la intervención de la comunidad internacional por la difícil situación en ese país.
El mandatario informó ayer que el primer ministro de Haití, Ariel Henry, se comunicó el pasado martes por las vías diplomáticas para informar que desea mantener las mejores relaciones con la República Dominicana y que no está de acuerdo con ninguna comunicación que fuese imprudente.
«El ministro Henry siempre ha tenido una comunicación fluida desde que asumió y nos comunicaremos con él en su momento», expresó Abinader.
El pasado lunes se produjo en la red social Twitter un cruce de declaraciones entre el presidente Abinader y el canciller haitiano, Claude Joseph, a cuentas de la crisis que vive Haití. Abinader llamó a Estados Unidos, Canadá, Francia y la Unión Europea que actúen de forma “urgente” en Haití, a lo que Joseph respondió que República Dominicana también vive un “aumento de la criminalidad”.
Tras esas declaraciones, el Gobierno anunció la suspensión indefinida del programa especial para conceder visados a estudiantes haitianos residentes en el país, además de la revisión del programa de regularización.
Dichas medidas provocaron la reacción de sectores haitianos, quienes la consideraron de extremas.
Seguridad
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El mandatario recalcó ayer de manera enfática que está comprometido con proteger el país, al explicar que las medidas adoptadas buscan evitar la incursión de las bandas haitianas.
Todos los estudiantes haitianos que están en el país no cambian su estatus y no van a tener problemas, lo que se está diciendo es que no habrá una renovación automática y tenemos que chequearlos porque yo tengo que proteger este país. Si allá no chequean ni tienen ningún sistema, aquí sí», respondió el mandatario mientras golpeaba la mesa.
Al ser cuestionado sobre el avance de las bandas en la ciudad de Juana Méndez, Abinader añadió que entre el comercio y la seguridad el elige la seguridad, por lo que precisó que en la zona fronteriza fue aumentada la vigilancia con el despliegue de más de 3,500 soldados agregados a todos los servicios de inteligencia.
Informes de inteligencia establecen que el avance de las pandillas armadas en el norte de Haití, específicamente en la ciudad de Juana Méndez, podría interrumpir la cadena de suministros, afectar las importaciones y exportaciones de productos, las operaciones de zonas francas y a la vez la fuerza laboral del vecino país y de la República Dominicana.
La Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) tratará la próxima semana la situación por la que atraviesa el vecino país.