Al final de su mandato, el presidente Donald Trump llevó a cabo esfuerzos legales y extralegales en varios estados a fin de revertir los resultados de las elecciones del 3 de noviembre de 2020 y así mantenerse en el poder por cuatro años más, desconociendo el triunfo de Joe Biden.
En ninguno de esos estados esos esfuerzos se han revertido en su contra de las fortunas políticas del expresidente tanto como en Georgia, donde varios de los candidatos a los que respaldó público en las primarias fueron rechazados.
No solo Trump vio disminuir su ascendencia sobre la base del Partido Republicano local, sino que además sus problemas legales no han hecho sino aumentar en ese estado.
La mala hora de Trump en las primarias de Georgia
Las elecciones primarias del Partido Republicano en Georgia celebradas el pasado 24 de mayo fueron una catástrofe para el prestigio del expresidente. Trump respaldó candidatos cuya única credencial era la de creer ciegamente la “gran mentira”, el infundio del fraude que, según él, frustró su triunfo en las elecciones de 2020.
Trump desarrollo una verdadera “campaña de venganza” y un empeño particular en oponerse al gobernador Brian Kemp y al secretario de Estado, Brad Raffensperger, ambos aspirantes a la reelección, a quienes no les perdonaba haber admitido y certificado el triunfo electoral de Joe Biden en 2020.
Raffensperger también fue blanco de la furia del expresidente, por haber hecho público el contenido de una llamada que le hizo Trump el 2 de enero pidiéndole abiertamente que “consiguiera” los votos que necesitaba para alterar a su favor el resultado electoral.
En aquel momento, el secretario de Estado dijo haberse visto obligado a hacer pública la llamada después de que Trump lo acusara públicamente de estar “reacio o imposibilitado de responder preguntas” sobre un supuesto fraude electoral.
Tanto Kemp como Raffensperger ganaron sus respectivas nominaciones para la reelección con márgenes lo suficientemente holgados como para evitar segundas vueltas, lo que habla de la merma de la influencia de Trump en la base republicana del estado.
John Gordon, el candidato de Trump para la Fiscalía General fue derrotado por el actual fiscal Chris Carr, mientras que los candidatos a la Cámara de Representantes respaldados por Trump, Vernon Jones, conocido como el “Trump negro” y Jake Evans, perdieron la nominación en una elección de segunda vuelta celebrada en junio.
El único triunfo significativo para Trump en Georgia fue el del exfutbolista Herschell Walker para el puesto en el Senado que actualmente ocupa el reverendo Raphael Warnock, quien es considerado como uno de los senadores más vulnerables del ciclo actual.
Sin embargo, la revelación de la existencia de tres hijos fuera del matrimonio, en medio de una campaña basada en valores familiares, han puesto a Walker en desventaja. Una encuesta realizada en junio por la Universidad Quinnipiac le da 10 puntos de ventaja a Warnock.
Entre una investigación local y una federal
Trump una vez aseguró que podía disparar contra alguien en la Quinta Avenida de Nueva York sin enfrentar repercusiones legales, pero podría ver en Georgia el fin de la ilusión de su inmunidad legal.
Fani Willis, la fiscal de distrito del condado de Fulton, el asentamiento de la ciudad de Atlanta, inició una investigación criminal sobre los esfuerzos de Trump para desconocer y cambiar los resultados de las elecciones presidenciales en Georgia.
La investigación fue iniciada a raíz de la ya famosa llamada de Trump a Raffensperger, pero se ha extendido para abarcar la designación de electores falsos favorables a Trump que serían entregados al Congreso al momento de la certificación de los resultados de los Colegios Electorales.
Un Gran Jurado especial conformado para investigar una posible interferencia criminal en las elecciones presidenciales de 2020 en Georgia emitió citaciones a todos los miembros de la lista de electores falsos, incluyendo a Burt Jones actual candidato a vicegobernador del estado y David Shafer presidente del Partido Republicano en Georgia.
Rudy Giuliani, quien fungía como el abogado personal de Trump durante los días posteriores a las elecciones, la abogada de la campaña de Trump Jena Ellis y el senador republicano de Carolina del Sur Linsey Graham, quien hizo dos llamadas a Raffensperger a favor de Trump, también fueron citados.
La caída del prestigio y la influencia de Trump en Georgia, junto con la investigación criminal que está siendo adelantada en el condado de Fulton son apenas el inicio de los problemas del expresidente, quien según dio a entender el fiscal general Merrick Garland (sin decir nombres específicos) esta semana está en la mira de una investigación criminal por parte del Departamento de Justicia.
La investigación federal está centrada en el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, pero también se extendió a las listas de electores republicanos falsos que pretendían presentarse en varios estados.
Esta semana se supo que las comunicaciones de varios altos funcionarios de la Casa Blanca, incluyendo interacciones con el presidente Trump son parte de la investigación.
