Por Dr. Ramón Ceballo
La personalidad histriónica, es un trastorno que se caracteriza fundamentalmente por manifestar una excesiva emotividad, además, de un complejo de inferioridad, en el cual aparece un sentimiento constante de ser el centro de atención.
Este comportamiento entorpece el desarrollo natural de vida, porque, quienes lo padecen son además personas vanidosos, egocéntricas, que se sienten incómodos cuando no son el foco de atención. Es evidente la emotividad excesiva expresada a través de comportamientos no apropiados con el cual buscan sobresalir.
Los que sufren éste trastorno, buscan aprovechar las oportunidades para sobresalir a través de acciones exageradas, propias de actores, y convertirse así en el centro de atracción de quienes comparten con ellos. Con mucha frecuencia utilizan la intriga como forma de sacar ventajas y lograr sus metas.
En la búsqueda de sus objetivos se convierten en obsesivos; el resultado de esa obsesión los induce a orquestar planes malintencionados dirigidos a descalificar a los demás.
Este es un trastorno mental, el cual, generalmente impulsa, a quienes sufren de él, a rodearse de personas que ellos puedan manipular, buscando con ésta acción que le aprueben lo que hacen.
Como forma de alcanzar su tranquilidad, con frecuencia son propensos a enfadarse con los amigos que no les presten la atención que ellos esperan, halagándoles y aplaudiéndoles sus acciones.
Estas son personas con un carácter muy impulsivo y poco tolerantes con una gran tendencia a la frustración.
Las personas que sufren de éste trastorno cuando no logran su objetivo actúan contra los demás aunque no exista una razón aparente que lo justifique. Buscan siempre llamar la atención, aunque para lograrla sea a través de una manifiesta frustración.
El problema conductual de quienes sufren del trastorno de personalidad histriónica es que, muchas veces, son gentes con profundos vacíos y deficiencias, las cuales no le permiten competir y lograr sus objetivos.
Esta situación de superficialidad y carencia, los conduce a ser propensos, cuando no logran lo que han planificado a llevar al plano personal sus diferencias, presentándose siempre como víctimas; a través de ésta victimización pretenden descalificar a sus oponentes pensando que recurriendo a la misma pueden alcanzar sus objetivos.
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Debido al trastorno conductual los individuos con personalidad histriónica, desarrollan un estilo cognitivo extremista, por lo que asumen un comportamiento que arrastra un conjunto de actitudes y conductas caracterizadas por tener un contenido lleno de expresiones que a menudo son exageradas, carentes de detalles, que evidencia un sentimiento de inferioridad que los presenta como marginados sociales.
Las personas con este padecimiento suelen desarrollar mecanismos de defensa a través de los cuales cuales tienen tendencia a culpar a quienes le rodean de su propio fracaso, además, cuando una persona de su entorno hace algo bien, son incapaces de reconocerles sus méritos y su valía sin embargo son los primeros en criticar los errores.
Estamos tan acostumbrados a ver éste comportamiento en muchos de nuestros amigos, con los cuales a diario compartimos, que casi siempre pasamos desapercibidas sus acciones debido a que nosotros mismos creemos que son personas normales.
Las personas que padecen de trastornos de personalidad histriónica, actúan con destreza con el objetivo de ganarse la confianza de aquellos con quienes comparten responsabilidades, y de ésta forma lograr obtener protagonismo, estima y reconocimiento.
La necesidad de transcender de quienes tienen una personalidad histriónica, los conduce a crear en el circulo, social, político, profesional y económico donde se desenvuelven, la duda debido a que usan la intriga como estrategia para lograr sus objetivos, y así imponerse en el medio en el cual se desenvuelven.
Los que tienen una personalidad histriónica, a pesar de que siempre están buscando llamar la atención, son personas extremadamente sensibles a cualquier tipo de comentario, sea este un elogio o una crítica, debido a que siempre ven a otros como personas afortunadas.
Estas personas, con este padecimiento consideran a los demás como personas con éxito, mientras ellos se sienten fracasados, y ese convencimiento de su fracaso es la razón que los impulsa a utilizar la intriga, la calumnia, y la difamación para descalificar a los oponentes, y presentarse ellos, así mismo, como las personas confiables y capaces para asumir un mayor grado de responsabilidad.
Quienes sufren de trastorno de personalidad histriónica resultan individuos perjudiciales para aquellos a quienes ellos representan, debido a que tienden a oponerse a toda iniciativa o proyecto, cuando ellos no están en primer lugar, y como su problema de personalidad los limita, no entienden cuales son los objetivos del momento.
