Por Polón Vásquez Pvasquez3570@yahoo.com
Concurrir a una contienda electoral en un país como la República Dominicana, una nación subdesarrollada donde la mayoría de sus habitantes carecen de formación y educación política, no es extraño ver en las calles a gentes frustradas, maledicentes y amargadas por haber perdido las elecciones.
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Las personas que triunfaron en las elecciones del domingo 15 de mayo, están celebrando la victoria junto a sus partidarios, pero los derrotados están arropados con el manto negro de las frustraciones, las amarguras y el sabor desagradable que estas dejan.
Indudablemente que las frustraciones, resacas y amarguras políticas, generan en la mente humana, perversidades, maledicencias y acusaciones de todas índoles. Esas son realmente, las características e idiosincrasias de la práctica política en el país de Duarte, Sánchez y Mella.
Resultar victorioso en cualquier manifestación de la vida, nos satisface, nos enorgullece y esa satisfacción y orgullo que sentimos, se traduce naturalmente en alegría, gozo y placer por el deber cumplido.
El resultado final de las elecciones generales en República Dominicana, nos debe conducir a la reflexión porque ahora, en la oposición política habrá que jubilar y/o sustituir a todas aquellas personas que han demostrado, no estar en condiciones metales para hacer política en esta época de globalización.
Aquellos (as) que todavía no se han modernizado, están en deber de hacerlo y de esa manera ponerse a tono con las exigencias de los nuevos tiempos, una etapa superior de la sociedad donde el 90 por ciento de la propaganda política, se realiza a través de sofisticados medios de comunicación, páginas electrónicas, bloques de periódicos digitales y redes sociales.
A llegado la hora en que los partidos políticos dominicanos revisen la lista de sus integrantes y aquellos de mayor edad sean jubilados para que se queden tranquilos en sus hogares. El desgaste físico y mental, es un proceso natural e intrínseco de los seres humanos, y debemos reconocerlo.
Inmediatamente concluido el conteo de los votos, el país y sus gentes deben buscar un espacio tranquilo para descansar y ponerse a trabajar con miras al porvenir.
Desde este ángulo, felicitamos a los ganadores presidenciales (Presidente y Vicepresidenta, Senadores, Diputados, síndicos y otras posiciones electivas.
Esperamos que las próximas contiendas electorales porvenir sean mejores, y que los protagonistas de estas, demostremos mas civilidad, conciencia política, comportamiento humano y disciplina partidaria, pero que haya menos clientelismo político, reverencia y culto a la personalidad.