El pastor de la Iglesia menonita dice que pagó por sus delitos y que jamás imaginó que, 17 años después de aquel episodio la vida le daría un revés, el más duro que ha enfrentado hasta ahora.
“Presidente Obama, yo sé que tú tienes corazón, yo sé que tú eres padre, esposo… ¿Cómo te sentirías? ¿Puedes ponerte por lo menos un momento en mis zapatos? No te estoy atacando, nomás diciendo si podrías poner tu mano en la consciencia, practicar amor… ¿Verdaderamente confías en Dios?”, le preguntó al presidente de Estados Unidos.
Villatoro se encuentra en el norte de Honduras y cuenta con el apoyo de familiares y amigos. Y aseguró que intentará hacer lo posible por regresar a Estados Unidos.
El Comité de Defensa de los Derechos Humanos en Honduras dijo que hará lo posible por tramitar y conseguir una visa humanitaria para que pueda reencontrarse con su familia.
En Iowa, mientras tanto, su esposa Gloria y sus cuatro hijos estadounidenses están desconsolados. Señalan que no han perdido las esperanzas y que continuarán con protestas por la deportación.
En una entrevista al diario La Prensa de Honduras publicada en su página digital, Villatoro dijo que regresar a Estados Unidos era un tema difícil y que estaba pensando en emigrar a un país “que no sea Honduras” por la seguridad de los suyos.
“El asunto es por mi familia. Yo no voy a traerlos aquí. Ellos no se merecen eso porque son de allá (nacieron en Estados Unidos). Yo voy a seguir luchando por regresar, pero si no me quieren allá, no se puede rogar. Tendré que buscar otro país que me dé el apoyo que yo necesite y la seguridad primeramente, todo padre busca la seguridad para sus hijos. Si solo tienes para comer, está bueno, pero que ellos estén bien y no te los vayan a matar”, dijo.
La esposa de Villatoro también es indocumentada. Ambos califican para la acción ejecutiva que el presidente Obama anunció el 20 de noviembre del año pasado por ser padres de ciudadanos estadounidenses.
La medida está detenida temporalmente por una corte federal de distrito luego de una demanda entablada por 26 estados el 3 de diciembre, quienes argumentan que el presidente se extralimito en sus poderes ejecutivos y que la medida viola la Constitución.