Por Johnny Sanchez
Economista
El mensaje unido de todos alcanzó transversalmente a casi todas las instancias de nuestra sociedad, a instituciones públicas y privadas, inclusive los medios de comunicación y a las redes quienes ayudaron mucho a amplificar el mensaje.
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Fue un triunfo de todos juntos.
La marcha del 22 de enero en R.D. y en toda la diáspora dominicana donde vivimos, los exiliados económicos que no disfrutamos de las subvenciones, cajitas y prebendas que le dan al clientelismo cautivo allá, para mantenerlos pensando solo en pan, circo y chercha, marcó un hito en la historia social dominicana reciente.
En Miami, donde vivo, los Doctores Ceballos y Campillo, representaron el sentir de todos, sin ser partidistas, se expresaron como simples dominicanos cansados del circo de impunidad que desde 1996 se apoderó de todos los estratos de poder para agrupar una mafia delincuencial de cuello blanco, peor que la de los tigüeres a quienes el gobierno no les ha puesto el cascabel.
Demostraron que Danilo no ganó con 62% que hubo un colosal fraude y que la popularidad al día de hoy del Manilo Medina anda por el 22%
Sin embargo, los defensores de la impunidad dicen que Danilo goza de muy alta popularidad, pero no se percatan que toda popularidad es relativa y lo mucho hasta Dios lo ve.
Me sorprenden las bocinas que dicen miren los logros de Danilo, el programa Quisqueya Aprende Contigo, donde hubo fraude pues no fueron 2 millones solo miles los alfabetizados y se tapó el caso.
Dicen todos sus logros, la Barquita, la tanda extendida, Bono gas, solidaridad, la cual no se ha aumentado desde 2012, ni a los guardias y policías con sus familias a quienes dicen le dieron servicios de salud, que antes no tenían, una mentira más, pero no dicen nada de los sueldos cebollas que militares denuncian.
Esa masa silente debería marchar para decirle a Danilo que las bocinas no le dicen la verdad y que los miles de millones de impuestos cobrados a ese mismo pueblo con el itebis, gasolina y peajes, más los miles de dólares en préstamos y venta de bonos deberían dar para hacer más y creemos que se ha hecho algo, es cierto, pero no para callarle la boca a los que queremos más.
Su trabajo Presidente, es hacer y no pagarles a bocinas para que digan que Ud. ha hecho más que Balaguer y Leonel juntos.
Pero me írrito más cuando dicen que la ley considera estos casos de macuteos, sobrevaluaciones y mentiras que, por ser de más de 10 años, no se puede hacer nada.
Dicen están prescritos paso el tiempo de ventilarlos. No es cierto. La nueva constitución del 2010, expande tiempo de prescripción dependiendo de factores y en base a tratados internacionales firmados, entonces investiguen esto no debe pararse.
Si es por lavado, perjurio y tráfico de influencia prescripción se paraliza, vea el art. 48 código procesal penal, estos ministros, no pueden dejar de decir la verdad, porque no se acuerden o porque prescribió el caso. Para el pueblo murieron civilmente y nadie confiará en ellos.
¿Acaso por no acordarse dejan de ser delitos o se convierten en menos importantes? ¿Acaso tendremos que obviar los US$92 millones por los que empresas involucradas en el caso Lava Jato contrataron durante el 2002 al 2014, solo porque lo dice?
Lamentablemente, aún no hay sustento legal para mandar preso a ningún pez gordo, pero varios sabemos que, a buen entendedor, pocas palabras.
El porcentaje de aceptación del Gobierno ha bajado mucho.
Por lo tanto, es obtuso, por parte de los gobiernistas, tratar de tapar el sol con una mano y creer y tratar de hacer creer a la gente que todo está bien.
Algo pasa y sería necio por parte del Gobierno no verlo, así algunos piensen que marcharon “cuatro gatos”, por lo que es hora de ajustar la brújula.
¿Qué es lo fundamental en nuestro país? Encontrar la ruta del dinero del macuteo. No solo pedir juicio político para todos los corruptos, sino también que la vía penal castigue a los responsables. Mientras tanto, quedan varios pendientes, entre ellos, exigir mecanismos de transparencia para todos.
Debemos fortalecer nuestro sistema de justicia. ¡No más impunidad!
Toca colocar el tema en la agenda pública, presionar a legisladores, jueces, fiscales, policías, autoridades a que aborden el problema, lo incorporen en sus prácticas y políticas públicas.
Pero también trabajar en las capas privadas de la sociedad donde la violencia, inseguridad y robo ha aumentado como nunca.
En RD el 70% de casos de robo, asalto y secuestros no se denuncian porque no hay una estructura de denuncias que la sostenga y por eso crecemos, dicen los de arriba, pero es hipotecando la nación para hacer ricos a algunos contratistas que siempre boronean para conseguir obras.
